Hoy no es un día cualquiera, para empezar mi hijo regresa a clases y esta vez en una nueva escuela. Para ambos es un reto por los cambios que implica, tanto en movilizarnos, los horarios, transporte, así como la incógnita de los compañeros con los que convivirá los siguientes 5 años.
También para mi es un nuevo inicio, ahora por fin aventándome a poner todas mis fichas en el arte. Pero no de forma planeada, una vez más me ha tocado reaccionar. Por algún motivo han coincidido en no pagarme a tiempo las personas con las que estuve trabajando los últimos años. Afortunadamente esta es la última vez que sucede.
Que me sirva de lección para dejar de depender económicamente de terceros.
Así que voy a enfocarme en ser el mejor papá del mundo y disfrutar de hacer arte, crear industria y compartir conocimiento.